La Comisión Europea presentó una propuesta de directiva al Parlamento Europeo y al Consejo para reducir el impacto de diez tipos de plástico de un solo uso en el ambiente, entre los que se encuentran los plásticos de los recipientes de alimentos. Una vez que la propuesta de directiva sea aprobada tendrá que ser implementada por lo estados miembros en un plazo de dos años.

El conjunto de medidas propuestas por Bruselas se centra en los diez productos de plástico de un sólo uso que son encontrados en las playas y en los mares europeos, así como en distintos aparejos de pesca. Todos estos materiales representan el 70% de toda la basura marina, según el Ejecutivo comunitario. El objetivo del paquete de iniciativas, por tanto, es reducir a la mitad los desperdicios de estos productos con el fin de evitar daños sobre el ambiente que supondrían costos de 230.000 millones de EUR en 2030 y la emisión de 3,4 millones de toneladas equivalentes de dióxido de carbono (CO2) ese mismo año.