
El mercado de bebidas energizantes en México ha sido uno de los más dinámicos en los últimos años, en 2016, las ventas de este tipo de bebidas mantuvieron su tendencia creciente, especialmente impulsadas por los consumidores jóvenes, que demandan estos productos con el objetivo de mantener concentración y energía que les facilite cumplir sus múltiples actividades diarias, caracterizadas por largas jornadas de trabajo, horas de estudio, tiempos de transporte, entre otros.
Cabe destacar que desde 2014 que entró en vigencia el impuesto a las gaseosas y bebidas azucaradas, las compañías fabricantes de estos productos han buscado alternativas para depender menos de la bebida carbonatada; ya que el consumidor ha tomado conciencia de los efectos negativos para la salud que puede ocasionar la ingesta diaria de refrescos con alto contenido de azúcar.